Quieres escribir cuando tu historia te incomoda, te sorprende y te ahoga al mismo tiempo. Este, por lo menos, es mi caso. Presentarme en pocas palabras es un ejercicio abstracto que aún me toma bastante trabajo. Es fácil salir del paso con un saludo: nombre, profesiones, casado o soltero, cuántos años llevas intentando ser feliz y cuantos de infeliz llevas entre fracasos y tropiesos; donde vives o si andas por ahí conociendo el mundo.
Siempre me ha tocado inventarme verdades para disimular mis mentiras, me explico mejor, complejos intentos para parecer normal. Desde que empecé a escribir agradezco sentirme así, ser quien soy: un colombiano que ha nacido en todas partes, un húngaro que no ha muerto, un alemán frustrado, un argentino de provincia, del sur, donde se enrreda el fin del mundo entre los pies y caminar es un esfuerzo inútil por llegar a alguna parte.
Tengo muchos años para pocas cosas y muy pocos para otras, de hecho no creo en los años y tampoco en el tiempo, por más que a algunas horas tenga que obedecerles con fidelidad. Sé que detrás de cada pantalla están ustedes con sus historias, trataré en mis horas fieles conocerles, aprender de ustedes. Que maravilla tropezarme por aquí.
Interesado por: Me interesa la literatura en un sentido amplio, sin predilección de género
Autores o libros favoritos: Ryszard Kapuscinski, José Saramago, Oliver Sacks, por el momento... entre otros mas...