Migrar: historias desplazadas Diputación de Huesca, Visiona y Fundación Escritura(s)

Convocatoria cerrada

Migrar: historias desplazadas

Del 02/03/2020 al 04/05/2020

1000 palabras máximo

Primer premio de 1.000 euros

- comentarios

482 participaciones

19 de junio. Publicado el fallo del jurado

La historia de la Inmigración española

La historia de la Inmigración española

Qué abarca migrar

Se nos ocurren pocos temas más abarcadores y omnipresentes que el de las migraciones: por tanto, parece un buen motivo para convertirlo en un ejercicio literario; pero nos interesa igualmente, junto a esa percepción de que afecta o podría afectarnos a tantos de nosotros, su invisibilidad para otros muchos. Es un fenómeno absolutamente universal, la migración constituye para muchas personas el eje central de sus vidas, pero al tiempo es obviado por tantos otros como una circunstancia ajena que despachan o con indiferencia o con una mueca de hastío o de malestar. Nos interesa el contraste descorazonador entre esa gravedad que supone migrar para cualquiera y esa frivolidad e insolidaridad que muestra un número significativo de los no afectados, o incluso el miedo o cómo se alimenta ese miedo de los más privilegiados. Y con ello el espectro enorme de vivencias y actitudes que caben en un tema como este. Porque migrar parece una condición intrínseca del ser humano y es sin duda un factor clave en los cambios en el mundo, pero no nos gustaría escorar las propuestas solo hacia los casos más extremos. Migrar abarca mucho más (y muchas más escalas). Y comprende también muchas experiencias positivas, o una determinación no marcada forzosamente por la necesidad, o desplazamientos pequeños, casi minúsculos, pero significativos para sus protagonistas. Qué cabe y qué no cabe en este concurso literario es decisión de cada uno de sus participantes, a partir de ese ejercicio responsable de reflexión sobre su comprensión del tema, con sus propias vivencias o con las vivencias de personas que le son cercanas o cuyas decisiones lo afectaron directamente (la migración de los padres o los abuelos, por ejemplo), o con un ejercicio de ficción que le permita a su autor escarbar en una realidad que hasta que se ha puesto a escribir le resultaba más plana. No queremos reducir el sentido de migrar o migración con una introducción demasiado encauzada. Preferimos dejar solo apuntadas algunas direcciones y el deseo de vernos sorprendidos con otras diferentes. El diccionario dice de migrar que es trasladarse desde el lugar en que se habita a otro diferente. Migración es su sustantivo, el traslado. Como marco enorme para empezar a escribir es suficiente.

Lo que os pedimos es construir entre todos el registro más amplio y diverso posible de la experiencia que es migrar: recoger distintos territorios, distintas realidades, distintos actores, y distintos finales y distintas valoraciones también. En 1.000 palabras, o con 10 imágenes o con un video o un audio, cartografiar un espacio mínimo para sumarlo a otros muchos espacios mínimos que ubicados en un mismo eje de coordenadas nos permitan conocer el mayor número posible de puntos de un plano que tiene mucho de sentimental. Pensamos en el migrante y lo primero que nos viene a la cabeza es la forzosidad de sus circunstancias, la migración como un «verse obligado a», unas condiciones de partida durísimas, como son en muchas ocasiones, pero también hay o puede haber más adelante -y enfocarlo desde aquí el relato- una oportunidad que se concreta con un segundo hogar, y los matices positivos de volver a empezar, con ese ejercicio de audacia, de valentía, de fortaleza, de tantas otras cosas, o también la decisión no condicionada de querer cambiar de escenario para la vida, de tomar de este modo las riendas de un futuro que no tiene por qué verse constreñido a un lugar o unas premisas dados al principio, que supone también migrar. Cabe en el concurso incluso el relato de la vuelta de nuevo al hogar tras un tiempo fuera, con ese doble ejercicio de extrañamiento que hemos oído todos a quienes han regresado al punto de partida pero tantos años después que les cuesta reconocerlo. El ejercicio es un reto importante, porque hacer creíbles a sus protagonistas y sus historias nos obliga a reconstruir en sus cabezas ese equilibrio tan difícil y en permanente reformulación entre sus recuerdos y sus expectativas, la añoranza de lo perdido y la alegría por cada centímetro ganado a una vida que parecía no corresponderles.

Fotografía de Cristina García Rodero

Fotografía de Cristina García Rodero

Las migraciones en literatura

Entendemos que el Club de escritura es el espacio idóneo para juntar estas historias. Con miembros del Club en casi cualquier zona del mundo la diversidad de las aportaciones es su característica más valiosa. Pero junto a estas historias, que se irán sumando estos próximos meses en el espacio de participación de la convocatoria, queremos apuntar aquí algunas referencias literarias que buscan solo animaros a continuar en los comentarios este registro de libros que han abordado el tema de las migraciones. Recomendadnos los que consideréis más valiosos. Para empezar la cadena copiamos algunos extractos de 5 obras muy diferentes (que en ningún caso entendemos que sean las más significativas o las más valiosas, su elección tiene mucho de azaroso).

Del comienzo de Nada de Carmen Laforet:

Por dificultades en el último momento para adquirir billetes, llegué a Barcelona a medianoche, en un tren distinto del que había anunciado, y no me esperaba nadie.

Era la primera vez que viajaba sola, pero no estaba asustada; por el contrario, me parecía una aventura agradable y excitante aquella profunda libertad en la noche. La sangre, después del viaje largo y cansado, me empezaba a circular en las piernas entumecidas y con una sonrisa de asombro miraba la gran Estación de Francia y los grupos que se formaban entre las personas que estaban aguardando el expreso y los que llegábamos con tres horas de retraso.

El olor especial, el gran rumor de la gente, las luces siempre tristes tenían para mí un gran encanto, ya que envolvía todas mis impresiones en la maravilla de haber llegado por fin a una ciudad grande, adorada en mis sueños por desconocida.

Empecé a seguir -una gota entre la corriente- el rumbo de la masa humana que, cargada de maletas, se volcaba en la salida. Mi equipaje era un maletón muy pesado -porque estaba casi lleno de libros- y lo llevaba yo misma con toda la fuerza de mi juventud y de mi ansiosa expectación.

[…]

Sin abrir los ojos sentí otra vez una oleada venturosa y cálida. estaba en Barcelona. Había amontonado demasiados sueños sobre este hecho concreto para no parecerme un milagro aquel primer rumor de la ciudad diciéndome tan claro que era una realidad verdadera como mi cuerpo, como el roce áspero de la manta sobre mi mejilla. me parecía haber soñado cosas malas, pero ahora descansaba en esta alegría.

Del comienzo de La novia de Odessa, de Edgardo Cozarinsky:

Una tarde de primavera de 1890, un joven observaba desde las alturas del bulevar Primorsky el movimiento de los barcos en el puerto de Odessa.

En su atuendo endomingado, contrastaba tanto con la desenvoltura cotidiana de la mayoría de los transeúntes como con el exotismo de otros. Es que el joven estaba vestido para emprender una gran aventura: los zapatos de cuero barnizado se los había regalado su madre; el traje a medida, su tío, sastre de oficio, lo había terminado solo el día anterior a su partida; finalmente, el sombrero era el que su padre había estrenado veintidós años antes, el día de su boda, y no había tenido más que cinco o seis ocasiones de ponerse.

En ese momento le faltaban tres días para emprender realmente su gran aventura, pero para él las cuatrocientas verstas que separaban Kiev de Odessa, y esta primera visión de un puerto y del mar Negro (que se volcaría en el Mediterráneo, que se volcaría en el océano Atlántico) ya era parte de la travesía que haría de él un individuo nuevo.

Sin embargo, un velo de tristeza empañaba el entusiasmo con que devoraba todos los aspectos de la gran ciudad y su puerto. Carecía de toda educación sentimental, y su primer percance amoroso le trabajaba el pensamiento hasta impedirle gozar ante la realización inminente de su proyecto más audaz.

De las primeras páginas también de Paisaje sonoro de Valeria Luiselli:

Después, un día, Manuela me pidió que la acompañara a una reunión con una posible abogada. nos encontramos las tres en una sala de espera de la Corte Federal de Inmigración, en el sur de Manhattan. La abogada iba leyendo un breve cuestionario, preguntando cosas en inglés que yo traducía al español para Manuela. ella, a su vez, contó su historia y la de sus hijas. Venían de un pequeño pueblo en la frontera entre Oaxaca y Guerrero. Unos seis años antes, cuando la más chica de las niñas acabada de cumplir dos años y la mayor tenía cuatro. Manuela las había dejado al cuidado de la abuela. la comida escaseaba: era imposible criar a las niñas con tan poco. Manuela cruzó la frontera, sin documentos, y se instaló en el Bronx, donde tenía una prima. Encontró trabajo y empezó a mandarles dinero. el plan era ahorrar lo más rápido posible y regresar a su casa tan pronto como pudiera. pero quedó embarazada la vida se fue complicando y los años pasaron a toda prisa. las niñas crecieron hablando con ella por teléfono; escuchando historias sobre la nieve, las grandes avenidas, los puentes, los embotellamientos y, más adelante, sobre su hermanito. mientras tanto, la situación en el pueblo se fue volviendo más y más difícil e insegura, así que Manuela le pidió un préstamo a su jefe y le pagó a un coyote para que trajera a sus hijas.

La abuela de las niñas las preparó para el viaje. Les dijo que sería un viaje muy largo y les ayudó a empacar sus mochilas: una Biblia, una botella de agua, nueces, un juguete para cada una, ropa interior de recambio. Les hizo unos vestidos a juego y, el día previo a la partida, cosió el número de teléfono de Manuela en el reverso del cuello de los vestidos. Había intentado que se aprendieran de memoria los diez dígitos, pero las niñas no habían sido capaces. Así que cosió el número en los vestidos y les repitió, una, dos y muchas veces, una sola instrucción: no debían quitarse nunca los vestidos, ni para dormir, ni siquiera si se les ensuciaban, nunca, y tan pronto como llegaran a Estados Unidos, tan pronto como se encontraran con el primer gringo, fuera este un policía o una persona normal, hombre o mujer, tenían que enseñarle el interior del cuello. Así, esa persona llamaría al número que ella les había cosido en el vestido y les dejaría hablar con su mamá. Ya luego vendría todo lo demás.

De un cuento de Clarín, Borona:

Quedó el indiano solo, rodeado de baúles, en mitad de la carretera. Era su gusto. Quería verse solo allí, en aquel paraje con que tantas veces había soñado. Ya sabía él, allá desde Puebla, que la carretera cortaba ahora el Suqueru, el prado donde él, a los ocho años, apacentaba las cuatro vacas de Francisquín de Pola, su padre. Miraba a derecha e izquierda; monte arriba, monte abajo: todo estaba igual. Solo faltaban algunos árboles y… su madre. Allá enfrente, en la otra ladera del angosto valle, estaba la humilde casería que llevaban desde tiempo remoto los suyos. Ahora vivía en ella su hermana Rita, su compañera de llinda, en el Suqueru, casada con Ramón Lantero, un indiano frustrado, de los que van y vuelven a poco sin dinero, medio aldeanos y medio señoritos, y que tardan poco en sumirse de nuevo en la servidumbre natural del terruño y en tomar la pátina del trabajo que suda sobre la gleba-. […] Los sobrinos no le conocían siquiera. Le querían como a una mina. Y aquella era toda su familia. No importaba; quisiéranle o no, entre ellos quería morir: morir en la cama de su madre. ¡Morir! ¿quién sabía? Lo que no habían podido hacer las aguas de Vichy, los médicos famosos de Nueva York, de París, de Berlín, las diversiones del mundo rico, los mil recursos del oro, podría conseguirlo acaso el aire natal; pobre frase vulgar que él repetía siempre para significar muchas cosas distintas, hondas complicaciones de un alma a quien faltaba vocabulario sentimental y sobraba riqueza de afectos. Lo que él llamaba exclusivamente el aire natal era la pasión de su vida, su eterno anhelo; el amor al rincón de verdura en que había nacido, del que le habían arrojado de niño, casi a patadas, la codicia aldeana y las amenazas del hambre.

Y, por supuesto, de Chaplin:

* Foto de la portada: Divina Campo Ramiro, Gasolinera en Coso Alto. Huesca. 1956

Bases del concurso

La convocatoria admite cualquier registro que permita el editor de textos: relatos de texto, series de fotografías, cortos audiovisuales y grabaciones sonoras. Los requisitos básicos son un máximo de diez fotografías, textos de un máximo de 1000 palabras y vídeos (alojados en Youtube o Vimeo) de una duración máxima de cinco minutos.

El tema del concurso son las migraciones, los desplazamientos, en un sentido general y desde cualquier perspectiva.

Cada participante podrá presentar un máximo de una obra que deberá ser original e inédita.

El participante no podrá retirar su obra una vez cerrada la convocatoria. Si es un vídeo, se compromete a mantenerlo al menos durante un año en la plataforma desde el que lo haya subido.

Fechas: La convocatoria comienza el 2 de marzo y su plazo de admisión de originales abarca hasta el 4 de mayo (el plazo ha sido ampliado). Votaciones del 5 al 31 de mayo. Fallo del Jurado: 19 de junio de 2020.

Viajes y desplazamientos en ViSiONA, de la Diputación de Huesca

ViSiONA es un proyecto cultural organizado por la Diputación Provincial de Huesca cuyo objetivo principal es fomentar, apoyar y difundir la creación artística y el pensamiento contemporáneos en torno a la Imagen. Utilizando la educación y la participación ciudadana como estrategias para acercar la reflexión y prácticas artísticas contemporáneas a los habitantes de Huesca, ViSiONA propone una programación de seminarios teóricos, intervenciones, programas educativos, exposiciones y actividades culturales diversas. Todas ellas tienen como eje principal la Imagen y sus múltiples formas (fotografía, cine, vídeo, ilustración, etc.) y están distribuidas en diferentes momentos del año y distintos puntos del territorio oscense.

El nuevo ciclo de Visiona Huesca plantea una programación en torno a los conceptos viaje y desplazamiento, que definen, sin duda, una de las características sociales, culturales y económicas predominantes de este siglo XXI y son, por lo tanto, uno de los parámetros de desarrollo cultural con más peso actualmente.

Viajar ha sido siempre una de las aficiones favoritas del ser humano, pero también una de sus necesidades y obligaciones. El viaje del hombre clásico, representado en la figura de Ulises, donde el hombre es expulsado a los mares y busca incansablemente su hogar, no es el mismo desplazamiento del hombre moderno, siempre en búsqueda, inquieto en su necesidad interior, o el del hombre del siglo XIX que inaugura lo que hoy día llamamos el viaje romántico preludio de algo siempre por venir.

Pero a veces las propias circunstancias generan la necesidad del viaje y fuerzan un desplazamiento involuntario y forzoso debido a un malestar o condición. En ese sentido, el viaje es un proceso de cambio, de alteración, un desplazamiento temporal o definitivo de la identidad, no solo personal, sino del territorio visitado y abandonado, y del que se sale siempre trasformado. Esa transformación, en el territorio y en la sociedad, en el paisaje y en el individuo, estructurará los diferentes enfoques sobre los que trabaja Visiona en su nuevo ciclo.

Más información en su página web

 

Condiciones generales en el Club de escritura

1.  El concurso se desarrolla en la plataforma del Club de escritura, diseñada específicamente para dar cabida a este tipo de procesos, facilitando siempre la participación, la interactividad y la transparencia. Los concursos que convoca el Club son abiertos: desde el mismo momento en que se presenta una obra, esta se abre a la lectura, al comentario y a la recomendación por parte de cualquier visitante del club. Más adelante, la obra se somete también a la votación, en el entorno de un sofisticado sistema de programación y bajo el control de reglas destinadas a evitar abusos.

La participación en este concurso, así como el registro en el Club de escritura, es gratuita. El concurso se dirige a las personas mayores de 16 años registradas en el Club de escritura. Se puede participar desde cualquier lugar del mundo. Este registro es totalmente gratuito y no supone ninguna obligación de compra. No optarán a los premios los trabajos presentados por los empleados de Paradójica SL -empresa gestora de Talleres de Escritura Creativa- o miembros de Fundación Escritura(s), ni sus familiares directos, aunque pueden publicar aquí sus obras. En esta plataforma es necesario inscribirse con la identidad real, única forma de garantizar una única aportación por persona en cada actividad, aunque se puede presentar la obra con pseudónimo. Para optar a los premios de las actividades cualquier persona que se registre debe facilitar datos como dirección y teléfono que, en caso de duda, permitan verificar la identidad del concursante y/o votante y descartar la creación, por un mismo usuario, de varios registros bajo identidades diferentes; esos datos también son necesarios para garantizar el envío automático de premios en sus distintas categorías —concursante, votante, comentarista de obras a concurso—.

2. Los participantes deberán registrarse en el Club de escritura y enviar dentro de la convocatoria correspondiente una obra en los formatos admitidos. La presentación se llevará a cabo en las fechas de admisión de participaciones según la hora del servidor UTC (España peninsular). No se aceptará ninguna obra fuera de plazo.

3. Los autores cuyos relatos sean seleccionados para su publicación en el ebook colectivo renuncian a recibir una cuantía económica por los derechos de autor que pueda generar el libro.

4. La organización no mantendrá correspondencia sobre las bases del concurso.

Sistema de votación y jurado. Ganadores

En el periodo de votación popular es obligado que cada votante puntúe a un mínimo de 10 obras de sus compañeros. De no hacerlo, no podrá optar ni a los premios ni a su publicación en el ebook colectivo.

Desde la apertura del plazo de votación a su finalización (del 5 al 31 de mayo) se contabilizará el número de estrellas concedidas a cada relato. No se sumarán las votaciones de los usuarios que hayan votado a menos de 10 obras (el sistema garantiza la no contabilidad de los votos hasta completar el número obligatorio de votaciones).

Si el volumen de obras recibidas fuera excesivo, resultarán 100 obras pre-seleccionadas en atención a la puntuación popular y un jurado compuesto por profesores del Taller de escritura Fuentetaja y por miembros de la Fundación Escritura(s) será el encargado de distribuir los premios en atención a la calidad de los trabajos elegidos. El jurado se reserva la potestad de incluir entre los premiados o menciones obras no pre-seleccionadas entre los cien primeros en atención a su calidad.

Resultados

1. El resultado final del concurso y la asignación de los premios serán hechos públicos el 19 de junio. Serán comunicados por e-mail o teléfono a los ganadores

2. Si la notificación a los ganadores fuera devuelta como una cuenta de correo electrónico o teléfono no válidos, este será descalificado.

3. Los participantes que resulten ganadores definitivos del concurso aceptan y autorizan a que la mención de sus nombres y premios obtenidos pueda aparecer en la página web Club de escritura o en cualquier otro soporte comercial, publicitario o medio de comunicación que pueda utilizar Fundación Escritura(s) y Talleres de escritura Fuentetaja a fin de informar y hacer público el resultado del concurso realizado. Igualmente las obras participantes podrán ser objeto de difusión desde su presentación al objeto de servir de muestra de la convocatoria y animar a la participación.

Los participantes deben ser los autores de los relatos y los poseedores de todos sus derechos. Ante cualquier irregularidad en este sentido, el Club de escritura eliminará la obra publicada y expulsará al usuario.

Los premiados ceden expresamente a Fundación Escritura(s) los derechos de difusión de la obra presentada desde el mismo momento de su presentación para su publicación en los formatos y condiciones que se determinen, que en ningún caso exigirán exclusividad, pudiendo el autor difundir la obra como prefiera tras su presentación al concurso. El derecho de difusión se entiende para todo el mundo y por el plazo máximo permitido por la normativa aplicable en España. Los participantes cederán los derechos de publicación de las obras elegidas para formar parte de una posible publicación colectiva, de precio módico y cuyos beneficios irán destinados a la financiación de actividades de la Fundación Escritura(s). Toda difusión se hará citando el nombre del autor.

La organización se reserva el derecho de retirar del concurso cualquier obra que considere que no cumpla con las bases o haya sido reportada por otros usuarios.

En cuanto al uso de imágenes o vídeos, el concursante deberá ser capaz de atestiguar que sean de su autoría o, en caso contrario, acreditar que se dispone del permiso por parte de los titulares de los derechos de propiedad intelectual, industrial, imagen y/o cualquier otro del contenido que aparezca en la fotografía o, en su caso, consentimiento expreso de las personas que aparezcan en la fotografía para su exposición y/o difusión, eximiendo de cualquier responsabilidad legal a la organización.

4. El mero hecho de participar en la convocatoria supone la aceptación de las bases reguladoras.

La resolución que deba adoptarse por cualquier incidencia no prevista en estas bases corresponderá únicamente al organizador del concurso, quien resolverá con el mejor criterio, sin que proceda recurso alguno.

5. Los derechos de textos e imágenes permanecerán en poder de sus autores si bien ceden a la organización a su publicación en los términos indicados en las bases, y siempre haciendo figurar el nombre del autor. El ingreso como miembro participante en el Club se hará con dirección electrónica válida e identidad y dirección física real. La mecanización del proceso del concurso exigirá para la entrega de premios, si la hubiese, identidad y dirección física comprobables en los datos del registro.

6. Los ganadores del concurso dan su consentimiento a los efectos de acceder a sus datos personales y tratarlos con la finalidad de comunicar el resultado del concurso, utilizando para ello su nombre e imagen, sin que dicha utilización le confiera derecho de remuneración o beneficio alguno.

7. La organización no se compromete a mantener correspondencia o atender a consultas particulares de ningún tipo en relación con la convocatoria. Debido al proceso mecanizado de las convocatorias del Club de escritura todos los pasos estarán pautados y anunciados oportunamente en la web.

8. En cumplimiento de lo establecido en la Ley Orgánica 15/1999, de 13 de diciembre, de Protección de Datos de Carácter Personal, en la Ley 34/2002, de 11 de julio, de Servicios de la sociedad de la información y comercio electrónico y demás disposiciones dictadas en su desarrollo, Fundación Escritura(s) informa a los participantes que los datos personales obtenidos en el microsite club de escritura serán recogidos por parte de Fundación Escritura(s) y Talleres de escritura Fuentetaja, o a través de otras entidades que lleven a cabo la gestión o tramitación de los datos (encargado del tratamiento), y se incorporarán al correspondiente fichero automatizado de Fundación Escritura(s) y Talleres de escritura Fuentetaja. Dichos datos serán utilizados para identificarte como usuario de Fundación Escritura(s) y Talleres de escritura Fuentetaja, así como para el desarrollo de acciones comerciales (por medio de teléfono, SMS, correo electrónico y cualquier medio telemático), de carácter general o adaptadas a tus características personales. Podrás en cualquier momento ejercitar de manera gratuita los derechos de oposición, acceso, rectificación y cancelación de tus datos. Para ello, deberás contactar con nuestro Servicio de Atención al Cliente por correo electrónico a info@fundacionescrituras.org.

9. El hecho de participar en este concurso implica la total aceptación de estas bases, así como el criterio de Fundación Escritura(s) en cuanto la resolución de cualquier cuestión derivada del mismo.

Pacto ético

El votante se compromete a aceptar en todo momento del proceso de concurso el pacto ético cuyas cláusulas se definen haciendo clic en este enlace:

Pacto ético para participantes, votantes y comentaristas 

Contiene consideraciones muy importantes para el buen fin de la convocatoria. Si no las has leído ya en anteriores convocatorias es imprescindible para participar que las leas ahora con atención; resumen el espíritu de este club y las normas básicas de conducta en su seno. La no observancia de este pacto podría suponer la exclusión del proceso de concurso.

Hemos preparado un vídeo con las indicaciones que creemos que pueden seros útiles para comentar un texto literario.

Podéis verlo completo aquí, con un índice para visionar el tema concreto que os interese

Preguntas frecuentes

El espacio habilitado en cada convocatoria para escribir comentarios no está pensado para mantener los usuarios un diálogo con los administradores, sino para comunicarse los usuarios entre sí. Los administradores del Club de escritura Fuentetaja no pueden responder a todas las preguntas que formulan los participantes. Su papel es solo el de mediadores. Por favor, antes de ponerte en contacto con ellos lee detenidamente las bases de la convocatoria.

Resuelve tus dudas en Preguntas frecuentes.


RECOMPENSAS Y PREMIOS

Un primer premio a una obra elegida por el jurado

– 1.000 euros en metálico aportados por la Diputación de Huesca

– publicación de la obra en un libro electrónico colectivo

Un premio especial al ganador de la votación popular

videotaller de escritura de viajes impartido por Javier Reverte

– publicación de la obra en un libro electrónico colectivo

Un premio especial al mejor lector

videotaller «Escribir el viaje» impartido por Miguel Espigado

A los finalistas elegidos por el jurado

– publicación de la obra en un libro electrónico colectivo


GANADORES:

Premio al mejor relato

Dotado con 1.000 euros aportados por la Diputación de Huesca

Adriana Corral, con «Ana» 

Con un lenguaje cuidado y eficaz y el uso de las expresiones locales, Adriana Corral consigue mostrarnos, en solo mil palabras, el arco vital de una mujer migrante. Sin resúmenes ni atajos. Apenas con la visibilidad de los pequeños gestos y las escenas. Unos personajes bien perfilados, llenos de ternura, y un final acorde con el tono del relato cierran bien esta historia de familia.

Premio al mejor lector

Premiado con el videotaller «Escribir el viaje» impartido por Miguel Espigado

Pepa H.

Los comentarios de Pepa H. a los relatos de sus compañeros subrayan los valores positivos del texto, con una mirada crítica que atiende tanto a los aspectos formales como a las emociones y sentimientos que el relato le producen. A menudo señala también los aspectos mejorables del texto, pero siempre desde el respeto, la motivación y el gusto por compartir historias.

Premio al relato más votado por los miembros del Club

Premiado con el videotaller de escritura de viajes impartido por Javier Reverte

Alicia Prack, con «Pronto olvidarás…»  

Ha obtenido 526 puntos, y a 19 de junio 925 lecturas y 253 comentarios

Finalistas destacados por el jurado

Premiados con su publicación en un libro colectivo

Carlos Alberto Román Sánchez, con «Honduras»

Honduras es un relato con un comienzo trepidante, lleno de acción, y dos personajes sin nombre: el Hondureño y el Caribe a los que conocemos por lo que dicen y lo que hacen. Lenguaje sencillo y eficaz, buen manejo del ritmo narrativo y un final lleno de visibilidad y fuerza.

Iván Santander, con «La última valla»

Los diálogos lacónicos de Iván Santander nos muestran con eficacia y economía de medios la vulnerabilidad y la incertidumbre de unos personajes que emigran de manera clandestina. Un buen manejo de la escena y de la tensión dramática nos llevan en volandas hacia el final de la peripecia. Quizá con una menor adjetivación, el discurso del narrador acompañaría mejor la atmósfera del relato.

Jacqueline Sellan, con «La migración»

Nos ha gustado que la protagonista única de este relato sea la ciudad. Con unas descripciones vivas, dinámicas y llenas de visibilidad, Jacqueline Sellan va mostrando el proceso de ampliación y posterior deterioro de la ciudad. Original sinécdoque narrativa para explicar las consecuencias sociales de la migración en los lugares de origen.

José Cid Varela, con «Cuba»

Un relato bien narrado, lleno de humor y ternura. La primera frase “Me quedé bajita por comer patatas” es el mejor inicio para una voz honesta y efectiva. A través esta eficaz primera persona, se narran las vicisitudes y descubrimientos de una mujer humilde que, sin conocer nada, se lanza con valentía al mundo. Un simpático final vuelve a las patatas del inicio y nos cierra el cuento.

Lourdes Márquez Barrios, con «Con ese»

Un pequeño equívoco en la universidad, un instante apenas, un gesto. Con tan pocos mimbres, Lourdes Márquez Barrios pone en escena la historia de una joven que llega a Madrid. Una narración que mezcla con acierto fantaseo y realidad, palabras locales con modismos foráneos, para contarnos con la magia del humor un proceso de adaptación siempre duro y difícil.

Adrián López, con «Esperanza al otro lado»

Esperanza al otro lado plasma con verosimilitud los miedos y deseos que llevan a un joven emigrante a subirse a una patera. Un cuento realista que se demora con acierto en el drama de la decisión del protragonista, en la manipulación de las mafias y en la necesidad de las familias que los emigrantes dejan detrás. Qué lástima que el formato de mil palabras no haya permitido un mejor cierre.

Maruja Esperante Lozano, con «La lechera en el desierto de Arizona»

Este es un relato cargado de dureza y de coraje, que consigue mostrar un abanico de emociones medidas, desde el asco y la ira hasta el miedo, sin caer en la sensiblería. El buen uso de los tiempos verbales en futuro ayuda a transmitir la esperanza de esa madre que trata de cruzar la frontera con sus hijos y, al mismo tiempo, expresa la determinación de la protagonista por conseguir su objetivo.

Samuel Guevara, con «De visita»

Samuel Guevara nos cuenta en un tiempo de la historia muy corto (la espera ante la ventanilla de inmigración), en un único escenario (el aeropuerto) y con una sola protagonista, el conflicto de quien migra para trabajar y no se lo permiten. Una narración sencilla con una buena continuidad que alterna las descripciones que nos atan a la escena con los recuerdos y los miedos que nos aportan profundidad al relato.

Finalistas

Premiados con su publicación en un libro colectivo

Abdala, con «Movimiento del destierro»

Alexia, con «Miedo»

Alicia Prack, con «Pronto olvidarás…»

Aparecido Número Uno, con «Amparo»

Cecilia Flores Torres, con «Ciudad de las piñas»

Elisa Rivero, con «Tu foto en la pancarta»

Graellsia, con «Como el musgo»

Jess, con «Resituación»

Juliana Maese, con «El jardín de las migraciones»

Luz D. Montero Espuela, con «Eran cinco hermanos»

María Nélida Pedernera, con «Argentina, enero de 1975»

María Laura Fuchs, con «Un libro y un pollito»

Mireya Piñuela, con «La de antes, la de ahora»

Ofelia Gómez, con «Luisa»

Rommel Soto, con «Letras rojas»

Rosa Cardona Cabezaolías, con «La lotería»

Rubén, con «Vacaciones en Casa»


COMPARTE ESTA CONVOCATORIA

OPINIONES Y COMENTARIOS