CANTAVIEJA
Verano de 1985, en la calle General Moscardo de Novillas las bicicletas apiladas y los gritos de los niños, no conseguían hacer callar a la tía Francisca, todos los días del año, la vieja tía Francisca salía a su ventana enrejada a las diez de la noche aunque estuviera helando y cantaba. Nunca nadie había...