Viaje de emociones…
A mi madre: desde Asturias a Cantabria en autobús, descubrí cuatro generaciones, un viaje de emociones… Delante de mi asiento iban una madre con su hija de tres años. Lo primero que me sorprendió era la frescura de su relación: la madre tendría unos veintidós años. Le pidió patatas a la hija y la pequeña...