borrador
Esta semana, en la librería, se me acercó una señora pidiéndome recomendación literaria para una adolescente a quien no le gusta leer. A la cabeza me sobrevino este primer pensamiento: «Entonces, no fuerces porque es probable que el resultado sea peor y acabe por detestar los libros» y le siguió este otro: «Podría darme una...