Confianza
Yerba y azúcar. No creo que interesen para un cuento. Pero es lo que hay. Más el mate y un termo. Conversan. Tienen ya más de cincuenta. El hombre recuerda que, cuando se conocieron, tenían veinte y pico. Habla y su mujer escucha. Y de vez en cuando asiente con un: “Ajá. Claro que me...