Sueños sobre asfalto.
Yo era tan solo un niño en aquél entonces, un pequeño varón que, justamente después de asistir a la escuela, cruzaba una puerta que daba a otro universo totalmente distinto al que habitaba día tras día. El sol yacía suavemente en el medio de aquél precioso firmamento azul, y las nubes desaparecían sin dejar rastro...