Cena en el Ritz.
Se conocieron un verano en París. Alice viajaba sola, y Daniel en uno de sus escapes. Aventurero y bohemio, sin arraigo en ningún sitio, con casi nada en los bolsillos. Se encontraron en una patisserie y con el delicioso olor a pan recién hecho de por medio se reconocieron en un mismo idioma. No preguntaron...