¿Crees en el destino?
La tarde comenzaba a cernirse sobre el parque, dejando un rastro de luz que cada vez se veía más debilitada entre las hojas de los árboles. Becka se planteó cerrar su libro antes de que el fresco del crepúsculo la pillara por sorpresa otra vez, pero no pudiendo dejar el capítulo a medias decidió terminarlo...