Razones de una marioneta
La marioneta estaba hecha de piel y huesos. Poseía un tono grisáceo en su superficie, derivado de lo que alguna vez debió ser negro. La primera vez que la vi, sus ojos eran dos luces ocres bañadas por el tórrido sol del Mediterráneo. Sus pupilas encerraban en ellos un terror alucinado, una mezcla de miedo...