VIAJE AL ÁRBOL DE LA VIDA
Nunca había estado en el cementerio aunque mi abuela llevaba treinta años allí. Cuando conseguimos encontrarla, nos llamo la atención el gran árbol que crecía vigoroso frente a su escueta tumba. Pronto comprobamos que era un extraño rosal ya muerto pero cubierto por las plantas vecinas. Ana quiso arrancarlo, pero la contuve. Primero tenemos que...