A media noche
Anoche al despertar contemple tras la ventana, aquella ciudad vacía, me levante de la cama y luego de ponerme unos zapatos a media noche salí, en mi reloj pasadas las 12, era lindo escuchar el tic-tac de las manecillas, por la calle ni una sola alma, era muy solitario, un frio exagerado, ese viento helado...