A LA ESCUCHA DE LA CONCIENCIA
Un suspiro de agonía retomó el conocimiento. Los gemidos se prolongaban con una aspiración fuerte, el corazón y los pulmones comenzaban a funcionar. Regurgitaba gran cantidad de líquido que procedía del estómago, se agarraba a un trozo de madera flotante. Abrió los parpados y por un momento pensó que estaba muerto, pero aún no, aún...