El dueño de la llave de la experiencia
Fuego, calor, nervios, expectación, los colegios daban el pitido de salida. Cada año era el momento más esperado por todos, un momento mágico, caótico tal vez, en el que todos los vecinos, en menesteres diferentes, pero en una sincronización que hoy después de 30 años aún no he conseguido comprender, mucho menos intentar poner en...