Viajando entre barrotes.
La tentación de huir me galanteaba junto a su estrepitosa respiración. Mis ojos se abrían en la oscuridad que arropaba la cama, mientras la vida que no tenía se balanceaba provocativa sobre mis pensamientos y mi sed. No podía dejar de viajar a través de ellos. La falta de amor propio y de orgullo habían...