cartas de amor y abandono desde el país de los perdedores
Seis años hemos pospuesto nuestro hermoso rencuentro. Me he convertido en una sombra que vacila silenciosa, ardiendo y consumiéndose en soledad. Ya he dejado de decirte que te adoro. Sigo trabajando, la visa no me la han dado, pero ¿qué más da?, no puedo contártelo todo en unas pocas líneas, ¿es que solo fuimos eso...