Te esperaré en mis recuerdos…
Para Berta. Perdóname. Será duro para ti, pero es lo mejor. Lo sé. Lo aprendí de los enfermos que pasaron por mi consulta durante años, siempre con algún familiar al que no reconocían. Aquellos cuidadores de surcos profundos bajo los ojos que arrastraban una carga sin esperanza. No quiero que seas tú uno de ellos....