Otros mundos…
…Conforme avanzaban por el pasillo, se encendían automáticamente las luces. No había ventanales, ni ninguna clase de abertura en las paredes. Una música ambiental constante, acompañaba durante dieciocho horas al día a las personas que habitaban ese mundo: Musicoterapia. La música adecuada para producir los efectos deseados en el organismo humano. Euforia, alegría, dinamismo, reposo, relax, todo...