Café con Magdalenas
Me desperté con el delicado olor del café recién hecho. Era mi primer día de mis ansiadas vacaciones.¡Por fin habían llegado! Me levanté y me acerqué a la ventana. Contemplé tranquila, sin prisa, con el sosiego que produce el paisaje del campo, la tierra de naranjos que tenía a mis pies. Su fertilidad, con el...