Los ataúdes de Capdevisio.
─ Capdevisio u’ mueito, Capdevisio u’ mueito ─ Era el grito de una maratón de niños de oscurecida tez que corría hacia su botica, cada vez que en el vecindario alguien dejaba de existir. El primero en llegar recibía una propina. Él, con cara de satisfacción, preguntaba quién era el fallecido y salía a negociar...