El Pan de los mendigos
Las heladas ráfagas de los andes, bajaban y se aglomeraban por entre los blancos solares, por entre los huertos yermos y abandonados, por entre las derruidas casonas, y por entre la vieja estación de trenes, congelando y entumeciendo cada madero, cada hierro, cada tornillo y clavo, y cada carne hasta el dolor tortuoso. Y entre...