Cicatrices de un guerrero.
Tras varios días postrado en la cama de un hospital, conseguí cobrar la consciencia. Abrí los ojos, mi mirada se chocó contra la noche más oscura, y tenebrosa que jamás hubiera podido imaginar. Sentí pánico, no recordaba nada. ¿Qué me había pasado? ¿Por qué no podía moverme?, ¿Qué hacía tumbado en una cama de hospital?...