UN ANDÉN.UNA REFLEXIÓN
Estoy acá, detenida en este mundo que rota para otros y a mí me paraliza. La gente pasa por delante: unos ríen, otros caminan ensimismados en las curvas de sus mentes. Los niños tironean la ropa de la madre, el indigente pide monedas, el diariero vocifera la venta. Y todo sigue para ellos. Mientras yo...