EL VAGO
20 de julio 1998 Hoy tampoco tuve suerte en encontrar algún trabajo. Cuando llegué a casa le conté a mi mujer algo de lo que me di cuenta. – Sabes, creo que aquí en España hay muchos migrantes de Albania y hay muchos soldados. –¿Porque dices esto? me preguntó ella.– Porque hoy se me acercó...