Desechos
Es sábado. Montiel, tras haber comprado en la cafetería Oberweis de Gasperich canapés, pastelitos y una botella de crémant, camina temeroso hacia su destino. Cada mañana recorre con su mono naranja corporativo, colgado de la trasera del camión, algunas calles de la ciudad centroeuropea en la que vive desde hace ya algunos años. Con sus colegas...