Un Ultimo Otoño
William Correa, ese viejo gruñon, terco y cascarrabias. Su nieto Marco pendia entre la vida y la muerte desde hace mas de tres meses en el hospital de Valencia, y él qué habia hecho?; aferrarse a la sensual botella, su segundo amor. En su mano ron Superior, gasolina de avion, como decia Marco, no era...