El sapo sumergido
JULIA Las arrugas de su rostro delatan la morfología sinuosa del dolor. Eres hermosa. Podrías tener una existencia apacible y aun así prefieres la soledad del viaje. Espero mientras observo como tu mano da toques rítmicos al ratón, como oculta el auricular del teléfono. Me gustan, son grandes, poderosas. Te levantas, estiras la espalda ¡que...