Es inútil esperar
No quería molestarte esta mañana. Necesitabas descansar después de tantas noches fatigosas. Después, la tos se te fue apagando. Tenía que hablar contigo. Intenté llamarte varias veces pero me hubiera sentido culpable de interrumpir tu sueño. Cada tanto iba hasta la puerta de tu habitación, apoyaba sigilosa el oído y esperaba escuchar algún indicio de...