El Picaporte
Luego de una noche truculenta y de mucho movimiento como suele sucederle a muchos hombres solteros, al despertar en la mañana, Juan entreabre los ojos lentamente, observa el cuarto desde su cama, las mismas cuatro paredes pálidas y sin vida, todo está como siempre, no hay ventanas, no hay cuadros, no hay vida, frente a...