Démeter y Perséfone
Latifah Rhazali se había servido demasiados bourbons —de tres dedos cada uno— con cubitos de hielo y en un vaso de tipo rock glass. No pudo resistirse a cumplir con el ritual de olfatearlos antes de que se deslizaran por su garganta. Titiritando y nerviosa, había colocado la nariz por encima del borde del vaso...