VIOLETA
Violeta, cuando pequeña, mi madre la dejaba salir desnuda por los jardines de la casa, la niña se bañaba con la tibieza de la lluvia. Mantenía los rasgos característicos de mi madre: ojos pardos y profundos, la cabellera negra como espesa lana oscurecida alrededor del cándido rostro pueril, su sonrisa descubría unos dientes pulidos como...