club de escritura Fundación Escritura(s)-Fuentetaja
158participaciones
I Concurso de relatos sobre pobreza y exclusión social EAPN 22/09/2013: El concurso ha finalizado su fase de votaciones y deliberaciones. El fallo aquí
1º premio: ‘El cielo de Madrid’ Roger Calabuig
PREMIO Fuentetaja. Una beca para un taller de escritura intensivo online de Talleres de escritura Fuentetaja y publicación del relato.
2º premio: ‘La Ventilla’ Emma Cotro
PREMIO Premio Hélice Viajes.- Un fin de semana en un Hotel Rural (sábado a domingo) y publicación del relato.
“Y vi a un ángel que estaba en pie en el sol, y clamó a gran voz, diciendo a todas las aves que vuelan en medio del cielo: Vengan, y congréguense a la gran cena de Dios, para que coman carnes de reyes y de capitanes, y carnes de fuertes, carnes de caballos y de...
Padre nuestro que estás en el cielo… Santificado sea tú Nombre;Venga a nosotros tu reino: -Porque este se desmorona. Intervenga y gobierne a la humanidad, para que vivamos unidos-Hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo: -Y que esta sea con igualdad de condiciones y de oportunidades- Danos hoy nuestro pan de cada...
Un mes lleva el abrigo en el cuarto de atrás. < ¡Para que se oree! -dijo la madre-,a ver si se le quita ese olor a tabaco y a frío.> Esta muy gastado, rozadas las mangas, desgastados los codos y el cuello, tiene deshilachados los ojales y alguna que otra mancha inconfesable. Por eso lo...
Tal vez sean los muebles del salón o esa mancha de humedad que luce en la pared y que nunca arreglo. Puede que se trate de las celosías de la ventana aunque estén un poco pasadas de moda, quizás los retratos de la cómoda; la foto de mi marido el día que volvió del ejército,...
– ¡Pero entra, que hay langostinos! – Que no, que no quiero nada con esos. Nunca me han dado nada. Yo me quedo aquí- dijo el hombre, agarrando con fuerza su sucio y atestado carrito. – No, hombre, que hoy sí te van a dar de comer. Es Navidad, hay mucha gente dentro. ¡Venga, que...
Día 1: En ésta, como en todas las grandes ciudades, si gritas nadie te escucha y si padeces nadie te mira, pero he aquí que si silbas o canturreas, la gente se admira. Sin rumbo ni pretensión, con las manos en los bolsillos, desemboco en una pequeña y recogida plaza, rodeada de copas que clarean...
Desde bien pequeña me preguntaba porque mi familia y mis amigas o vecinos, teniamos coche, comida,un hogar y por el contrario otras carecian de todo. Un dìa le pregunte a mis padres que significaba Unicef, ellos me lo explicaron y tambien me hicieron ver que el mundo no era justo y estaba mal repartido… ...
La lluvia de la madrugada le alivio un poco el alma. El sonido del agua cascando sobre el techo, eximia un poco en el, la culpa inconsciente, e injusta, de su insomnio. Tendido de costado sobre su lecho, observaba el choque constante de las gotas sobre su ventana, escupidas por las ráfagas intermitentes de la...
Cierto día del año pasado me desperte he hice mi rutina habitual, encender la televisión, bañarse, cambiarse y justo cuando llegué a esa parte vi una noticia que me impactó mucho; habían arrestado a una banda de asaltantes a tiendas de conveniencia, comenzaron a nombrar uno por uno y escuche su nombre Héctor Iván Sánchez...
Elena y Rafael ante la peste rosa. Elena y Rafael caminaban de manera incesante en busca de que llevar a casa. Con el sol radiante y abrazador recorrían las calles de la gran ciudad en un viejo triciclo y con una campanilla gritaban reciclamos baterías y toda clase de chatarra. Los dos caminaban tomados de...
La luz de la farola entraba por la ventana e iluminaba tenuemente la habitación, que un día fue preciosa. La persiana se sujetaba a duras penas con un par de ladrillos que había encontrado en el solar de al lado. Le agobiaba despertarse en mitad de la noche y encontrarse a oscuras. No podía dormir,...
Después del trabajo, Carmela corría junto a la ribera del Manzanares. Esa tarde ni siquiera se puso los cascos. No estaba para música. Cruzó el puente con el corazón alterado. Paró para descansar mirando al rio. Los brillos del agua se confundían con las imágenes insistentes de aquellos ojos desorientados. Y el otro, el otro...
