No todo lo cuadriculado es recto
Un ligero desasosiego lo despertó del letargo matinal: no acababa de creerse que hubiera olvidado besar la imagen plastificada de su santa patrona, la que ocupaba un lugar preferente en su mesa, la que cada día, al empezar la jornada, sacaba con devoción contenida del acolchado refugio que le había preparado en la gaveta superior....