Cotidianidad, enfermedad y muerte.
El hospital, con sus grandes ventanas que parece que te observan desde que vas acercándote. Los tonos: amarillo y gris, café y azul. Las construcciones a la entrada obstruyendo el paso libre y haciendo toser el polvo. Sus rampas llenas de personas que comparten un mismo denominador. Cobijas, frio, y una cara de preocupación con...