«LA MENTE DOMINA AL CUERPO»
Eran las 02.00 horas de la madrugada, estábamos a la orilla del Mar y la brisa era tan fuerte que el frio llegaba hasta los huesos, temblábamos. Ellos, no solo eran compañeros, no éramos hermanos de sangre, pero el simple hecho de pasar cada minuto de sufrimiento, dolor, cansancio y la desesperación por que termine...