Mortalidad

No deseo que mi nombre sea recordado,

pero quiero en letras dejar algo.

Anhelo no ser olvidada.

Sin embargo, para ser inmortal no he hecho nada.

No hablo de una inmortalidad física, 

pues sé muy bien que el cuerpo se acaba. 

Parloteo tanto con querer comprender el alma,

ahora me doy cuenta de que sólo quiero cuidarla. 

Mi alma me llevará lejos el día que parta,

así que quiero dejar mi espíritu en cada palabra.

Cuando alguien me lea y piense en mi nombre

recordará mi cabello, mi templo y sus dioses.

Unos dioses que no se veneran ni gozan de valores,

a quienes no les creé altares, proezas ni canciones. 

Aquellos que pinte en lienzos con diamantina de colores, 

aquellos formados por las constelaciones.

Hablo de el sol, la luna y el mar.

Hablo de lo que el universo me puede dar.

Hablo de el fuego, la tierra y el aire,

y todos aquellos sentimientos que en mi arden

Que mis emociones me guíen al llamado de mi madre.

Hablo de la madre naturaleza, para no hacer tanto alarde.

Sé que tomo mis caminos y me espera algo grande.

Sé que no voy a perderme, pues el universo sabe guiarme.

-IG

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