Reviviendo lo vivido.
Ay mi pequeña Marta, ¿Qué nos pasó? ¿Por qué a nosotros? Nos esperaba el mejor futuro; lo teníamos en la palma de la mano. Rozábamos el éxito con la punta de nuestros dedos y de repente nuestros sueños se derrumbaron como un frágil y delicado castillo de naipes; cayendo al oscuro vacío del olvido para...