club de escritura Fundación Escritura(s)-Fuentetaja
369participaciones
El taller de escritura: concurso de microrrelatos Admisión de originales: 15 de mayo a 17 de junio
Periodo de votaciones: 18 de junio a 9 de julio
Fallo del Jurado: 27 de julio
era los años 90 en el Peru y pachin estaba en nada ,la pobreza de su familia y la numerosa cantidad de hermanos fue determinante para buscar nuevos horizontes y fue asi de casualidad que descubri un pequeño universo de lima conocido como tacora. llegue y un policia me pidio que le ayude ya que...
Es martes y odio a mi marido. Él fue mi mentor. Yo concurrí a su taller. Estoy calma, porque no pensar, no recordar es mi rutina. La realidad aparece. Cuando me hundo en ella, pataleo en forma constante para regresar a la superficie de mi monótona fantasía. Observo otras alumnas. Soy igual a ellas. Ser...
El creador dotó a Los Djinn de cierta tangibilidad en el mundo humano. Más aún, a humanos y Djinns los hizo afines a tal punto que ambas especies, en no pocas ocasiones, han engendrado hijos. Además, el Uno les otorgo a los Djinn la familiar sensación fantasmal del libre albedrío así como el disfrute de...
Entre tantas letras en el taller de escritura me sumerjo a reflexionar y concluir, que me encuentro extinto de luz. Esa luz que una vez encendiste en mi, Pero no supiste mantenerla, así que la apagaste de sopetón. Dejando mi camino a oscuras lleno de tinieblas. Y sin bastarte eso susurraste a las luciérnagas: Que...
Bajo una vela que transgredía la ley de la noche, papeles arrugados con saña, esparcidos a lo sumo con un párrafo, arropaban una triste figura que, pluma en mano, refunfuñaba: «¡No puede ser tan difícil!». Cerró los ojos y pergeñó la idea, luego los abrió; en el techo: verbos, sustantivos; en las paredes, el resto:...
Mi padre dijo «amén» y las mariposas vistieron de azul. Algunas viejas que hasta el momento rezaban, salieron a soñar despiertas. Los pájaros se colgaron de las ovejas, creyeron que eran nubes y ellos viento. Los muertos dejaron de llamar y la realidad olvidó su enfermedad. Los caballitos, flacos, acarreadores de miseria, por primera vez...
Las tardes de los martes se vuelven a juntar en el taller . Transcriben sentimientos y fantasías. Y después de cada palabra rematan con un inesperado vistazo, desaparece un plural, un lapsus masculino o un verbo irregular. Son pocas letras pero eficaces en contenido pues se ocupan de cosas que hay que contar. Algunas desaparecen...
La pregunta de Peralta quedó suspendida en un mutismo casi sepulcral. —Joder, ¿por qué están aquí? —Escribir satisface la necesidad de crear — aventuré a decir. —Te acercas, pero no es suficiente. —La Literatura otorga desahogo, evasión, expresión y poder —añadió Lía. —Sí, pero siempre existirá un anhelo oculto. ¡Coño!… Tener un hijo, plantar un...
Se debió sentir vació cuando él se fue de tu cama, pasar las frías noches de invierno sola, hablando con el espejo, perdida entre tus sabanas de seda roja…
Necesito ocultarme de mi, de las ausencias, de los fantasmas que asechan por la habitación. Uno de estos seres adquirió la apariencia de una mujer y me abofeteo. ¡Olvídame! -gritó cerca a mi oído. Posteriormente, las palabras se precipitaban por mis dedos, sentía un placer inmenso al serpentear la pluma contra el folio, hacen falta...
Éramos dos extraños conviviendo. Lo cierto es que hizo falta un taller para mirarnos por dentro. Escribimos juntos. Escucho música y brotan frases confusas y semifusas. Él prefiere el silencio y esa voz absurda que le dicta. Si duerme, enredo sus fantasías, las retuerzo en un bucle hasta despertarlo obsesionado. «Dichosa imaginación» Y escribe, compulsivo....
Cuando tiré la basura en el contenedor, me di cuenta de que no llevaba el anillo de casada. Como me iba grande, seguro que se me había caído al echar los desperdicios. Me metí dentro del contenedor para recuperarlo, pero como no aguantaba el hedor, decidí marcharme. Antes de salir observé un libro en un...
