Yendo
Estuve sin pensar, Marzo se fue. Los vientos de gregal asoman/se van. Yo en casa te espero. Un abrazo en el móvil, pero ni me acuerdo de nuestro último beso. Seamos caseros, hasta que nuestros dirigentes, se limpien las manos. Todo como siempre. Buenos y obedientes. Confinados tras paredes de opacos cristales. Viendo las sombras...