El Caminante
El viejo tren que salió al mediodía de una estación de ferrocarril moderna, diáfana y ordenada me dejó al anochecer en otra antigua y lúgubre. El petate que llevo a hombros pesa demasiado. En él cargo una suerte que ya está echada. Me llamo Paco Guerrero, caminante de profesión. Esta noche he vuelto para cobrar...