BARRIENDO MI ALMA
¡Puff! ¿ se puede tener una vida más asfixiante que la mía ? lo dudo. Siempre la misma rutina todas las madrugadas, tan monotonas como un reloj. Me levantaba con la maldita alarma, no sin antes darle unos 30 minutos mas a mi cerebro para que volviera a este miserable mundo. Mi alarma sonaba de...