Mi hermano Pedro.
Pues sí señor, yo me lo chingué, pero no por mi gusto, sino por esos tipos, que disque son palabras mayores. Mire, le cuento, estaba yo en mi casa, durmiendo a la una de la madrugada, como siempre hago, y llega mi compa, mi amigo, mi conocido, tocándome la ventana me despierta, yo pensando que...