La cena
¡Antonio, por favor, estate quieto, que se te va a salir el líquido de embalsamar por el oído derecho! ¿No ves que te tengo que atar bien, no vayas a caerte? Qué buena idea tuvo tu madre cuando nos compró estas cortinas. Mira que son feas, pero esta cuerda tan gorda que parece de amarrar...