La niebla del tiempo
Caminaba con prisa aquel primero de noviembre, iba a la plaza de armas a buscar una tienda abierta para poner dinero a mi línea de celular; era temprano, lluvioso y con mucha niebla. Era agradable ver aquellas calles vacías sin más ruido que la lluvia tenue, cuando llegué a la plaza, una luz tintineante proveniente...