EL ARTISTA Y SU CRUZ
“Los envidiosos no encuentran la paz. ¡Dios los salve! Y así era ese hombre. Fiel a sí mismo, como el arte que convoca y domina, apresando entre sus manos lo infinito. No usaba traje Giorgio Armani ni zapatos de piel. Simplemente colgaba en su pecho una cruz: Amar al prójimo. Su mano izquierda sujetaba una...