Busca aire
Estoy ya en la puerta de embarque número 36. En 40 minutos aparecerá una azafata con ropaje ceñido y se colocará tras el mostrador. Antes de que haya podido encender el lector de tarjetas, una enorme fila habrá dado la vuelta al espacio, llena de mochilas y piernas inquietas. Las mías estarán inquietas también, temblorosas,...