LA CHICA DEL BOULEVARD
Eres tan hermosa. Y tus palabras me han conmovido tanto, que me siento avergonzado. No sé si abrazarte y dejarme llevar por el deseo, la lujuria, el instinto animal que me trajo hasta aquí, o marcharme contigo y protegerte como la criatura indefensa en que repentinamente te has convertido. Con tus manos temblorosas y tu...