LA CITA
Llego a la hora acordada. El lugar no había cambiado, el Café-Bar-Restaurant, no envejecía, siempre había estado allí; era un espacio turístico de este barrio pituco de la ciudad, en el que se había cometido un atentado terrorista que tuvo resonancia internacional. Vladimir ya se encontraba sentado, desde la mesa que escogió se podía apreciar...