La despedida
Querida mamá: No pude irme. Hace años que te sigo despidiendo. Escribiendo. Nombrándote. El tiempo no pasa. Estás durmiendo la siesta. Son las cinco de la tarde. Con mis hermanas, la Seca y...
club de escritura Fundación Escritura(s)-Fuentetaja
397participaciones
I Concurso Historias de la calle FALLO DEL JURADO
Acta del Jurado con los premiados y finalistas
Primer premio, dotado con 1000 euros, para Alfredo Darío Ruiz Martínez con “Pueblo negro”
Premio al lector más destacado, dotado con 250 euros, para Ramón García Pérez
Querida mamá: No pude irme. Hace años que te sigo despidiendo. Escribiendo. Nombrándote. El tiempo no pasa. Estás durmiendo la siesta. Son las cinco de la tarde. Con mis hermanas, la Seca y...
La primera vez subí a la casa por aquellas escaleras de mármol amarillentas en las que entrabamos justos yo y un señor mayor con cara de bonachón que estaba visitando a su hija. El barrio de clase media baja con un bar , estanco , parque y 3 bloques de viviendas en paralelo y mi...
Toda la vida me crié con vista a la calle Ameghino. En una casa construida por mis abuelos, en el barrio de La Teja. Cuando cumplí 15 años me mude con mis padres una cuadra más arriba, a otra casa más grande y de dos pisos. Una casa desubicada de linda para lo que es...
Esta calle peculiar no tenía más que accesos con escaleras. De la vertebrante Reina María Cristina a la vía que conduce al Polideportivo de Candás, frente al que construyeron el Tanatorio. Haz deporte, con salud, pero es inútil: «al platu vendrás», parece anunciar ominosamente… Volviendo a mi calle, arriba, junto donde sitúa Cogersa los cubos...
Texto: Avenida de Papa Negro Hortaleza, Madrid 1.4 km ; 2 parques Se traspasa calle de la infancia por emancipación. Preferiblemente familia con hijos pequeños, totalmente asfaltada de glorieta a glorieta (menos de 20 años); dos parques: uno a estrenar y otro a reformar; más de un kilómetro para correr, cuestas pronunciadas para bici o...
A ella le gusta caminar por la ciudad, escucharla, observar todas las cosas y descubrir las historias que esconden tras ellas. Muchos le dicen que es un lugar peligroso y hostil , como una jungla de asfalto llena de fieras salvajes que esperan al acecho por una presa fácil como ella, pero Sonia sabe ver lo ...
Tras el recodo, al doblar la esquina, los niños asoman como cometas empujadas por un viento invisible que controlara voluntades. Y corren a lo largo de la calle, abruptamente, casi a tropezones, con la risa fácil y las voces sueltas. Por allí anda mi hermano, el pelo alborotado, las manos breves en continuo movimiento....
Hace ocho años me mudé acá. Fue tras un nuevo fracaso. Otra vez sólo yextrañando una hija de dos años, con cuarenta y nueve.Así llegué a este conventillo vertical. De entrada, fui abordado porcaras obesas, amargas, desconfiadas. Propietarias, de las ventanas porlas cuales se descolgaban, con el fin de no perderse nada delcontenido de mis...
Mi infancia fue en Rio Gallegos, Santa Cruz, Argentina y en 1970 mi calle era mi patio de juegos. Como todo barrio periférico de esa época su traza de tierra y canto rodado se convertía en una tormenta de arena en el verano con el paso de cada auto, en un pantano los días de...
Iba por la plaza, donde tantas veces te vi, donde tantas veces te soñé. Mi mente quería llegar hasta donde tú estás, mis ojos querían ver lo que estabas haciendo. Las lágrimas del alma corrían por dentro; de pronto me senté, y por un momento descansé. Allí nomás, un hombre con aspecto desaliñado, casi te...
Pique al vacío Aquella mañana de domingo el pito del zorro Barrera sonó como de costumbre indicándonos que debíamos concurrir a la cancha. Inconscientes de cualquier peligro la cuarta , tercera , segunda y primera infantil del Club Deportivo Olímpico se presentó casi completa. Mi mejor amigo ya se encontraba en Suecia, nadie sabía donde...
La puerta más famosa del barrio, grande, madera con alto relieve, mano metálica para llamar y adentro, un patio perfectamente empedrado. Esa fue mi casa, centro de reunión muchas veces, los amigos sentados en la vereda, jugando. No se pueden separar buenos y malos momentos, en el recuerdo todo se unifica y es una conclusión...