La noche más bella
Anochecía… Titilaban las estrellas mientras yo continuaba allí parado, soñando que ocurriera lo que tanto tiempo había anhelado. Se levantó una brisa agradable y fresca… El mar comenzaba a inquietarse, sus olas, se estrellaban incesantemente contra la arena, formando una espesa estela de espuma. Yo permanecía allí, en silencio, contemplando con desinterés aquella escena. No...