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I Concurso de Relato Breve «El dios Tecnología» 
Concurso finalizado. El resultado final del concurso y la asignación de los premios se ha determinado el día 30 de marzo de 2013. Puedes acceder aquí al contenido del fallo y el reparto de premios. Paralelamente hemos realizado una valoración de esta primera experiencia de concurso abierto y participativo que ha resultado un rotundo éxito: casi 600 originales a concurso, más de 15.000 votaciones contabilizadas, y lo que a nuestro juicio supone el mayor logro: más de 124.000 lecturas de los relatos a concurso y numerosos comentarios cruzados. Las luces y también las sombras de esta convocatoria se incluyen en este documento de valoración que incluimos aquí.
¡Descárgate la aplicación electrónica para que no le falte perejil a tu San Pancracio digital! Hostias para celíacos, ¡sin gluten! ¡Rodilleras con triple capa para tus largas oraciones! Tu Dios en un «click». Todo empezó hace quince años. Ella se llamaba María, ella me gustaba… y mucho. Pasé la típica tarde dominical que mezcla un...
No creo en las religiones, pero sí en la fe y el amor, capaces de construir imperios, mover ejércitos, desafiar familias y razones. No creo en Dios, su poder, fuerza y omnipresencia, pero sí en una energía creadora, inmensurable, incomprensible, ignota. Presa esquiva de científicos, ausente a la vista, presente en la materia y lo...
Hoy en clase de historia dimos un repaso rápido al siglo veinte. Lucía nos habló de las dos grandes guerras mundiales, de la crisis del petróleo y de la Unión Europea, de la expansión comercial de Oriente y del hundimiento de Rusia. Eso en cuanto a política internacional. No habló casi nada de arte porque...
Generalmente solemos no reconocer nuestros defectos como así tampoco admitir en solemne y humilde acto de conciencia, que éstos junto con nuestras virtudes nos generan el ser que somos. El predicador predica más con su proceder y el líder da ejemplos de actitud en lugar de enseñar teorías acerca de cómo alcanzarla. El filósofo hace...
En la cumbre internacional de Jefes de Estado celebrada a comienzos del año 7025 post Bellum, la humanidad fue declarada especie en vías de extinción. Dos años antes, la C.O.M.A.C. (Colmena Mundial de Abejas Científicas) había iniciado proyectos de investigación que resultarían cruciales en el hallazgo de energías alternativas al combustible humano.
Era un lugar idílico. Mar azul, arena limpia, soledad, al fondo unas barcas de pescadores, amarradas sobre la arena. Me tumbe a la sombra de una de ellas, me eche el mundo a la espalda, como recomienda Alcántara, y me puse a soñar con la alegría. Pero algo monstruoso paso. El paraíso tenía cobertura y...
Aunque se esforzara, le resultaba imposible ver más allá de la negrura que lo rodeaba, pero podía escuchar lo que parecían ser voces de mujeres jóvenes, tan inesperadas como la pequeña luz que de poco en poco se fue aproximando a él, volviendo imposible su visión. Cuando pudo enfocar nuevamente, se encontró corriendo tras un...
La mujer de mediana edad se sentó a la cabecera de una gran mesa de cristal. Rodeada de caras que la miraban anhelantes, movió la mano por un punto concreto de su superficie donde, bajo la anticuada imagen de un sobre, se leía: InBox. Al instante se elevó sobre la mesa una colección variopinta de...
Quien me iba a decir a mi hace años cuando todavía saltábamos a la comba o jugamos al bote bote o un poco mas crecidita cuando empezaban esos primeros móviles que eran tan enormes que el bolso se quedaba torcido cuando lo metías en el o el único Wasap que teníamos eran los gritos de...
Joder, juro que no fui yo. Si usted dejara de golpear su dedo sobre mí con tanta insistencia podría explicárselo todo. Fue ese inútil del sector Ajustes/Sonido. Se lo he dicho mil veces a nuestro superior. Que ese tío no iba a estar a la altura de un dispositivo como éste. Si viene de gestionar...
Siento que alguien nos está mirando. Es como un peso que me oprime aquí, en la nuca, y se me clava entre los omóplatos obligando a volverme. Hay unos ojos negros, redondos, profundos, clavados como un aguijón en el círculo que hemos trazado en la tierra. Su mirada está ausente, ida, como si un fantasma...
Estaba porque él quería estar. No había ni ataduras, ni siquiera una idea base que lograse tentarlo; su gusto era puro placer. Se sentía profeta, eso sí, más allá de toda solución o de toda alternativa. Era un esclavo de su idea del “todo” y no concebía mundo más ajeno que su propia capacidad de...
